Es el arbusto por antonomasia de mi tierra con una flor preciosa en el mes de mayo, que ha calentado las cocinas alistanas desde siempre. Sus hojas segregan una sustancia pringosa, el ládano, que por allí llaman cerute. En los otoños templados lluviosos y en simbiosis con una bacteria, según nos cuentan investigadores de la universidad de Valladolid, de sus raíces brota el boletus edulis, la seta de la jara, dicen los alistanos, una delicia gastronómica. Estos días me he acordado de Víctor Jara, el cantautor chileno, asesinado por Pinochet y su panda en colaboración con los de arriba en el 73. Parece que quieren empezar a hacer justicia. ¡A buenas horas, mangas verdes! ¡50 años después!
Usado así en Chile
"Víctor Jara estará siempre en el corazón de la gente que lucha por la igualdad, contra los privilegios de los poderosos."