También kílix, quílice o cílica, antecedente griego de nuestro cáliz, copa griega de cerámica negra con dos asas, decorada frecuentemente en su interior y en su exterior, usada para beber vino mezclado con agua en los simposios de los griegos clásicos.
"El kýlix dio en latín cálix y después nuestro cáliz o cálice como en italiano y portugués"