Enterrar de manera definitiva, especialmente a un difunto, por extensión hacer toda una ceremonia fúnebre. Se usa en sentido figurado por "terminar con un asunto". Proviene una antigua acepción del latín sepelio ("separar, esconder, apartar") que luego tomó el sentido de "exequias funebres".
"Tango, que me hiciste mal y sin embargo te quiero, quiero sepultar. La vieron a tu vieja con un pan de hash, vendiéndole a los negros en la calle Montparnasse. (Fito Paez)"