Es un nombre comercial de la creolina (que también es nombre comercial) y es muy popular en Argentina, donde ya se convirtió en nombre genérico. Existen variaciones en la composición, pero el principio activo es algún fenol mezclado con alquitrán de hulla y jabón. Se usa como un potente desinfectante e insecticida, y el nombre asocia las palabras "ácaro" con "naftalina".
Usado así en Argentina
"Y aquel olor se acrecentaba en intensidad a medida que avanzábamos por ese enorme corredor que finalizaba en la enfermería. Aquel olor a meada, a desinfectante, a acaroína inútil, a olvido rancio. (Luis Benítez)"