Juego de la Grecia clásica practicado en los simposios más bien al final cuando el vino, aunque normalmente rebajado con agua, según el simposiarca o rey del banquete, iba haciendo efecto. El último sorbo de la copa se lanzaba a una crátera o copa de boca muy ancha situada a cierta distancia a la vez que se pronunciaba un nombre de los presentes, una etaira o un esclavo u otro excepcionalmente. Si el líquido caía dentro, el libante tenía derecho a sexo.
"Algunas modalidades del cótabo no tenían fin sexual y también lo practicaban las mujeres solas con esclavos"