En principio es un diablo o diablillo, pero se usa en México para calificar a los niños traviesos. También significa triste, abatido, melancólico.
Fue traída a América por los españoles que la tomaron del latín Orcus,i ("orco").
Usado así en México
"... aviéntese, aviéntese de clavado, aviéntese, no tenga miedo, es una alberca, chamaco, usté cáigale a los huercos, cáigale, cáigale nomás, no vaya a caer antes de la piñata."