agua f. Líquido transparente, incoloro, inodoro en insípido, de fórmula H 2 0, presente en todos los tejidos y líquidos orgánicos y en muchas otras sustancias; es un elemento esencial para la vida. Por término medio, el cuerpo de una persona adulta contiene en peso el 55 % de agua, el 19 % de proteínas, el 19 % de grasas y el 7 % de materias inorgánicas. Si se deduce el exceso de grasa del peso corporal (masa corporal magra, MCM), el agua constituye en promedio el 70 % de la MCM, lo que equivale
AGUAS MINEROMEDICINALES
TIPO DE AGUA MINERAL
AFECCIONES EN LAS QUE ESTÁ INDICADA
sulfurosa
enfermedades de las articulaciones, cier
tas anemias, diabetes, neuralgias, derma
tosis pruriginosas, inflamaciones alérgi
cas de la mucosa nasal, asma. Está con
traindicada en caso de hipertensión y en
la hemoptisis (expectoración de sangre)
arseno-ferruginosa
convalecencias, astenia (pérdida de fuer
za), amenorrea (falta de menstruación),
corea, ciertas anemias
bicarbonatada
reumatismo, gota, psiconeurosis, neurosis
gastrointestinal, cálculos renales
sulfatada
estreñimiento, obesidad, cirrosis, hiperten
sión, enfermedades de la piel, afecciones
de la vesícula biliar
radiactiva
psoriasis, enfermedades de las articulacio
nes, ciertas anemias, diabetes, neural
gias, eccemas, dermatosis pruriginosas,
bronquitis, asma
clorurada
bronquitis crónicas, hipotiroidismo (falta
de actividad de glándula tiroides), gastri
tis crónicas, leucorrea, linfatlsmo, reuma
tismo, estreñimiento
oligomineral
cistitis, reumatismo, neurosis digestivas,
cálculos renales
agua
agua
Central potabilizadora de agua de mar en Canarias.
el cuerpo hay un continuo intercambio en cuyo equilibrio influye, entre otros factores, las variaciones de pH y la diferencia de presión osmótica en la membrana celular. La pérdida diaria de agua del cuerpo humano depende de factores fisiológicos, ambientales, etc., y su valor medio es aproximadamente de 2.600 mi, repartidos en la orina (1.200 mi), heces (200 mi), sudor (360 mi) y respiración (840 mi). La agua perdida se obtiene de la dieta: una parte se ingiere directamente y otra procede del metabolismo de los alimentos: los procesos meta-bólicos proporcionan energía por oxidación y producen anhídrido carbónico (C0 2 ) y agua. En una persona adulta de 70 kg de peso la cantidad de agua obtenida de esta manera es aproximadamente 300 ml/día. De este modo, teniendo en cuenta las pérdidas indicadas, el-volumen de agua que debe ingerirse directamente u obtenerse a partir del agua contenida en los alimentos es de 2.600-300 mi, es decir 2.300 mi. En los niños el balance líquido es más delicado y la deshidra-tación (deficiencia de agua en el organismo) puede ocurrir con gran facilidad. La sed constituye el mecanismo fundamental mediante el cual el cuerpo regula el mantenimiento del nivel de agua necesario para el organismo, siendo el riñón el órgano encargado de conservar el equilibrio hídrico mediante la reducción o aumento de la cantidad de agua eliminada por la orina. El agua en estado natural no es pura, sino que lleva en disolución elementos minerales indispensables para el buen funcionamiento del organismo y, en particular, de la célula (sales minerales de sodio, potasio, calcio y magnesio, como las más importantes); por ello, la alteración del equilibrio hídrico está estrechamente relacionado con la alteración del equilibrio salino. La deficiencia de agua en el organismo o deshidratación simple o primaria ocurre raras veces, en cambio la deshidratación secundaria (deficiencia de agua y sales en el organismo) es más frecuente y aparece como consecuencia de una diarrea intensa o vómitos, fiebre, estados morbosos en los que hay una pérdida notable de agua por la orina, etc. Por otra parte, la retención de agua en el organismo o hiperhidratación resulta de la ingestión de una cantidad de agua superior a la cantidad expulsada: esto ocurre durante el crecimiento, el embarazo y en la convalecencia, en ciertas personas que tienen tendencia a la acumulación. No obstante, al carecer el agua de valor calórico, el aumento de peso que experimente el sujeto no constituye un engorde en el verdadero sentido de la palabra. Otras alteraciones del metabolismo hídrico se refieren al pH (acidosis*, al-calosis*) y al equilibrio iónico de elementos como el calcio, magnesio, fósforo, sodio, etc. ¿ agua mineral: la que contiene sustancias minerales en disolución, en especial la que tiene propiedades terapéuticas.
Las aguas minerales vienen a ser fármacos y, como tales, administradas bajo instrucciones médicas, tanto en balnearios como en forma de agua de bebida, sirven para aliviar e incluso curar ciertas enfermedades. §u clasificación responde al tipo de iones que contienen y a su residuo fijo, que es el contenido en sales a 180 °C. Las aguas minerales propiamente dichas tienen un residuo fijo a 180 °C superior a 1 g/l, y se dividen en: cloruradas, sulfurosas, arsenoferruginosas, bicarbo-natadas y sulfatadas; a su vez, cada una de estas divisiones presenta diferentes tipos de aguas según los iones que contengan, por ejemplo: dentro del grupo de las sulfurosas se encuentran las sulfuro-sódicas, las sulfuro-sódico-yódicas, etc. Las aguas con un residuo fijo a 180 °C comprendido entre 0,2 y 1 g/l se denominan aguas mediominerales; para un residuo fijo inferior se llaman aguas oligominerales. Aunque la mayor parte de las aguas minerales poseen algo de radiactivad, no todas tienen una eficacia terapéutica respecto de esta cualidad. Por último, según la temperatura las aguas minerales se clasifican en: aguas
Las aguas minerales pueden administrarse en forma de baños.
frías, cuya temperatura es inferior a 20 °C; aguas hipotermales, de
temperatura comprendida entre 20 y 35 °C; aguas termales, entre 35 y 50 °C, y aguas hipertermales, de
temperatura comprendida entre 50 y 100 °C. Existen muchas modalidades diversas de administración de las aguas minerales, consistiendo la más sencilla y tradicional en tomar una cierta cantidad de agua después de las comidas. Un método bastante común es el baño con aguas termales o también la ducha externa. Las duchas internas, o irrigaciones, se practican en cavidades del organismo que comunican con el exterior, y el agua utilizada siempre debe tener la misma temperatura que el cuerpo humano; así, existen irrigaciones nasales, vaginales, rectales, etc. La inhalación cálido-húmeda consiste en hacer penetrar en las vías respiratorias un chorro de vapor en el que están dispersas pequeñas partículas de agua mineral; si las gotas son más pequeñas y forman una niebla, se habla de nebulización, y si aún lo son más, de aerosol; si se inhalan los gases liberados por el agua mineral, se habla de fumigación. La acción benéfica de las aguas minerales tiene lugar gracias a que modifican el metabolismo y mejoran las defensas del organismo. No obstante, la terapéutica hidro-mineral siempre debe ser prescrita y constantemente controlada por el médico. Entre las contraindicaciones más comunes destacan todas las enfermedades infecciosas, los tumores, la tuberculosis pulmonar y la úlcera gastroduodenal.
¿ agua oxigenada: solución de bióxido de hidrógeno, desinfectante, decolorante capilar y hemostático. (Cuando se vierte agua oxigenada sobre una herida, se liberan burbujas que oxidan el tejido y, al penetrar, limpian y desinfectan todas las partes sin alterar los componentes vitales.)
¿ agua potable: la que sirve para la bebida por no contener ninguna sustancia química, física o biológica perjudicial.
agua
marcado por mecanismos que se encuentran más allá de la estricta defensa de los intereses vitales de la especie, situándose en un área invadida por las pasiones, el resentimiento y demás factores distintos de los propiamente innatos. Es evidente, a nivel psicológico, que en la génesis de la conducta agresiva la personalidad del sujeto participa activamente, mientras que a nivel sociológico, también es indudable que por encima del plano biológico y personal del hombre existe una superestructura social que es capaz de condicionar formas colectivas de convivencia y pautas sociales de conducta. Todo ello ha dado lugar a diferentes teorías sobre la agresividad humana, que se pueden dividir en dos grandes grupos: teorías instintivistas y teorías ambientalistas. El denominador común de las primeras consiste en considerar que el comportamiento agresivo humano se debe a un instinto innato, condicionado por el desarrollo de la especie (filogénesis), cuya presentación es natural y espontánea (Freud, Melanie Klein, Konrad Lorenz). Los ambientalistas, en cambio, consideran la agresividad humana como consecuencia de las influencias del medio, por causas no innatas, sino adquiridas (escuela de Yale, Bandu-ra y Walters). Desde el punto de vista médico, cuando el ser humano tiene algún problema en su equilibrio psíquico una de las funciones afectadas es la pulsión agresiva: a veces, el trastorno de la agresividad es el aspecto fundamental del cuadro; en otras, se encuentra inmerso en otros problemas psicopatoló-gicos más sobresalientes. La agresividad se puede encontrar en el curso de todas las psicosis (manía furiosa, esquizofrenia, paranoia, etc.) y en muchos estados patológicos emocionales (neurosis, histerias, etc.). También subsiste como secuela de las afecciones encefalomenín-geas y de traumatismos craneales, y se presenta en los epilépticos. En los casos de intoxicación aguda o crónica (alcoholismo, intoxicación por cannabis, etc.), la agresividad es la consecuencia directa del efecto del tóxico, aunque también del oni-rismo o del trastorno de la conciencia que lo acompaña. En casos de epilepsia o intoxicación, la terapia recurre a los tranquilizantes e incluso a los anestésicos. En las psicosis se utilizan terapéuticas químicas neurolépticas (calmantes de la agitación) y, en casos graves y permanentes, la psicocirugía. En casos de psicosis emotivas o psiconeurosis puede ser muy beneficiosa una cura psicoanalítica.
¿ Cualidad de una sustancia química, usada principalmente con fines bélicos, para ejercer una acción tóxica e irritante.
Según los efectos producidos en el organismo, los agresivos químicos pueden ser: irritantes de los órganos respiratorios, que provocan edemas pulmonares (cloro, fosgeno); lacrimógenos, que irritan y queman las conjuntivas (cloropicrina, bromo, halogenuros de bencilo); vesicatorios, que irritan la piel produciendo llagas incurables (iperita), o nerviosos, que atacan el sistema nervioso provocando la muerte por parálisis.
a unos 40-45 litros. Esta agua se encuentra en el interior de las células (agua intracelular) o fuera de ellas (agua extracelular). En este caso puede formar parte del líquido intersticial que baña las células o de los líquidos circulantes, en especial del plasma sanguíneo. El agua intracelular representa el 50 % de la MCM (unos 25 litros) y el agua extracelular el 20 % de la misma (unos 16 litros), porcentaje que se reparte entre el líquido intersticial (15 %) y el líquido circulante (5 %). Entre los dos compartimentos de agua en