m. Determinación genética para un carácter en el material nuclear de una célula. 11 Conjunto de genes que determinan los caracteres hereditarios de un individuo.
Frencois Jacob (/920) y Jacques Monod (7910-1976), biólogos franceses descubridores del ARN mensajero, instrumento de la regulación genética.
Un carácter hereditario está codificado en la secuencia de ADN* (ácido desoxirribonucleico) de los núcleos celulares. En el caso de que se trate de un rasgo recesivo, para su manifestación será necesario que esté codificado por ambos genes alelos (genotipo homocigoto). Si un rasgo es dominante es suficiente que esté codificado por uno de los dos alelos (genotipo heterocigoto) para que se manifieste. Esta manifestación del carácter depende también de la expresividad del mismo y de la presencia o ausencia de otros genes que puedan modificarla. El conocimiento del genotipo de un individuo puede ser fundamental para establecer las posibilidades de transmisión a la descendencia de una enfermedad hereditaria, especialmente en el caso de que ésta sea recesiva. Esto permitirá realizar un consejo genético a los padres para evitar la descendencia en caso necesario. Así, por ejemplo, en la enfermedad conocida como anemia falciforme, los individuos con genotipo heterocigoto no suelen presentar patología a lo largo de su vida, mientras que los homocigotos padecen una enfermedad hemolítica grave y fenómenos oclusivos vasculares, pudiendo presentar lesiones cardiopulmonares, hepatobiliares, etc. Es por ello que se hace conveniente conocer el genotipo heterocigoto de los padres para ponerles al corriente de que hay un 25 de posibilidades de que su descendiente esté afecto de dicha enfermedad.