f. pI. Quimioterápicos resultantes de la combinación de un ácido orgánico con la hidracina (H,NNH.,). Las hidracidas son fármacos fundamentales antituberculosos, usados particularmente en el tratamiento de la meningitis tuberculosa infantil por su buena difusión a los espacios subaracnoideos. Son activas sobre bacilos extra e intracelulares y, en casos de intolerancia digestiva, se pueden administrar por vía intramuscular y venosa. En la tuberculosis pulmonar, la quimioterapia con hidracida isonicotínica ha representado un gran adelanto en el tratamiento de la enfermedad, siendo sus principales características la fácil difusión y la rápida eliminación. Por absorción penetra en el bacilo, actuando principalmente sobre su multiplicación, inhibiéndola. Actúa en dos fases, deteniendo el desarrollo como bacteriostático, en primer lugar, y desintegrando el bacilo como bacteriolítico después. La hidracida del ácido cianacético, muy bien tolerada, es de actividad parecida a la anterior, pudiendo ser empleada de entrada o bien sustituyendo a aquélla en caso de resistencia.