Es la tercera persona singular del pretérito perfecto simple (indefinido) del modo indicativo del verbo presagiar (prae: delante, hacia adelante y sagio sagis sagire: tener buen olfato): tener buen olfato hacia el futuro. Presagiar significa por tanto prever o conjeturar que algo va a suceder en el futuro observando indicios presentes. Ahora bien estos indicios pueden ser racionales o basados en la experiencia o el sentido común o pueden basarse simplemente en ideas superticiosas, como solían hacer los sacerdotes romanos augures, a quienes consultaban con frecuencia los políticos de entonces y que predecían el futuro por el vuelo o el canto de las aves. Así hablaban de buen o mal augurio según que las aves cruzaran el cielo de izquierda a derecha o de derecha a izquierda. En los pueblos de Castilla y León hay un ave, llamada alcarabán o pernil (burhinus oedicnemus), que al anochecer cruza el cielo emitiendo un sonido que algunos consideran de mal agüero, pues interpretan que dice: "morir", "morir"; y es que hemos heredado muchas cosas de Roma.
Sinónimos de presagió son vaticinó
"el augur presagió la victoria de César"