Es una parafilia, con una curiosidad etimológica. En principio, las filias, como las fobias, tienen raíces griegas, pero la palabra somnofilia está formada por somnus ("sueño") que es latina, y φιλια (filia, "amor, inclinación afectiva") que sí es griego; por lo que sería una 'inclinación sexual hacia las personas dormidas', que son objeto de prácticas físicas, lo que puede constituir legalmente un abuso; aunque también se llama así al placer de quedarse durmiendo y no necesariamente es una obsesión sexual. El punto para crear esta definición es que ya existe la palabra hipnofilia, que es totalmente griega y sería un sinónimo, pero en realidad la psicología la diferencia porque el hipnofílico sólo se masturba al observar a durmiendo a su objeto erótico y no suele tener contacto físico con él.
"La única somnofilia que tengo es la de quedarme durmiendo un rato más en la cama todos los días."