Tiene varias interpretaciones como sustantivo y como verbo, pero todas están relacionadas a una superficie plana y delgada. Se entiende como "sábana, hoja de papel, cara de una vela náutica, capa o cubierta, mortaja, partitura, ..." que se puede usar también como "la parte del terreno que cubre una lluvia" o la "escota que sirve para estirar las velas en una nave". Seguramente tiene un origen protogermánico, que llegó al inglés antiguo como sceat y evolucionó en el medioevo como schete ("longitud de tela").
"(Yo creí que tenía una relación con las hojas cortadas del papel de baño por ... bueno, nada, era idea mía.)"