Término muy utilizado en la alimentación animal, especialmente en los bovinos. Implica el grado de aceptación del producto suministrado en la dieta,sea un pasto o un forraje cualquiera, de los animales, cuyo sentido del gusto es desarrollado. Es frecuente encontrar calificativos como de baja, media o alta palatabilidad en los pastos y forrajes utilizados en la alimentación bovina. Los fisiólogos indican que especies como las aves domésticas carecen de gusto en su paladar, en cambio los rumiantes y más aún los bovinos domésticos cuentan con un gusto altamente desarrollado, lo que les permite ser muy selectivos en lo que consumen, es decir alimentos con alta palatabilidad.